Recife tiene un sabor especial los días de Carnaval, acompañado de mucha hambre y sed, porque bailar al frevo requiere mucho sustento para reactivar tus fuerzas.
Las corporaciones profesionales existentes en el siglo pasado, remanentes de los primeros siglos de nuestra colonización, dieron origen a los Clubes Frevo o Clubes Carnaval.
El corso, uno de los juegos de calle más tradicionales del carnaval de Recife, consistía en un desfile de vehículos ornamentados por las calles centrales de la ciudad, con juerguistas generalmente disfrazados, que tiraban confites, serpentinas en los ocupantes de otros vehículos.
Con el objetivo de revivir antiguos carnavales de calle, ayudando a mantener la tradición y contrabalanceando el predominio de los bailes carnavalescos de los clubes sociales de Recife, un grupo de amigos, liderados por el empresario Enéas Freire, resolvió crear, en diciembre de 1977.
El estandarte carnavalesco es una bandera, normalmente rectangular de tela soportado por una barra horizontal denominada travessa y por otra vertical llamada varão, diseñando y bordado decorativamente, representando alegorías y símbolos de las agremiaciones.