Según el Diccionario del folclor brasileño, de Luís da Câmara Cascudo, capoeira es juego atlético de origen negro, introducido en Brasil por los esclavos bantos de Angola, defensivo y ofensivo, difundido por el territorio y tradicional en Recife, ciudad de Salvador y Rio de Janeiro.
Es una danza típica de las playas que comenzó a aparecer en el litoral norte de Pernambuco. Una de las cirandeiras más conocida es Lia de Itamaracá. Surgió también, simultáneamente, en áreas del interior de la Zona de Florestas Nortes del Estado.
Danza típica de las regiones playeras es conocida en todo el Norte y Nordeste de Brasil. Algunos investigadores, sin embargo, afirman que ella nació en los ingenios, viniendo después para el litoral.
Es originaria de las viejas danzas populares de las zonas rurales de Francia (Normandía) y de Inglaterra. Fue introducida en Brasil, pero precisamente en Rio de Janeiro, posiblemente en 1820, por miembros de la elite imperial.
La danza, poderosa lenguaje universal, es un medio de expresiones importantes desde épocas remotas, así como la música. Los hebreos y egipcios tenían sus danzas sagradas. Entre los griegos y romanos ella era inspirada por el espíritu profano.