El primer cine de Recife fue el Pathé, localizado en la Calle Nueva (antigua Barão da Vitória), nº 45, inaugurado el día 27 de julio de 1909.
Poseía 320 sillas y una galería para autoridades y personas importantes. Sus socios-propietarios eran Antônio Jovino da Fonseca y Francisco Guedes Pereira.
Las películas exhibidas partencia a la Pathé-Frères, fundada por Charles Pathé. Las sesiones eran en el horario de las 12:00 a las 16:00 y de las 18:00 a las 22:00.
A partir de 1910, pasó a exhibir, a demás de películas, algunos flagrantes locales filmados por la propia empresa.
Menos de cuatro meses después surgió un nuevo cine en la ciudad: el Royal, también situado en la Calle Nueva, nº 47, perteneciente a la firma Ramos & Cia.
Los dos cines pasaron a disputar el público de Recife. el Royal exhibía siete películas, el Pathé colocaba ocho en su programación.
El Pathé, sin embargo, cerró antes de 1920. El Royal tuvo una vida de más de 40 años. Cerró sus puertas el día 1º de julio de 1954.
El Royal fue uno de los más tradicionales cines de la ciudad, siendo considerado el templo sagrado del cine pernambucano, en la década de 1920, cuando pertenecía al portugués Joaquim Matos.
En los lanzamientos de las películas del Ciclo de Recife, como Retribución, Jurando vengar, Héroes del siglo XX, Aitaré de la Playa y la hija del Abogado, el cine era todo decorado con banderolas, hojas de canela en el piso y patrocinaba la exhibición de bandas de música para su público.
En el día 26 de junio de 1910, fue inaugurado en la calle de la Imperatriz, nº 59, el teatro y cine Helvética, de propiedad de Girot & Cia. “Un casino familiar”, como les gustaba pregonar a sus dueños, que ajustaban su programación exhibiendo, a demás de conciertos de variedades, películas en los finales de semana.
Poseía una orquestra regida por el maestro Dinis y servia helados y refrescos en mesas colocadas en el jardín, al lado de la sala de proyecciones. En 1930, el Helvética pasó a ser un centro de diversiones llamado de Centre Goal.
El Polytheama, localizado en la Calle Barão de São Borja, en el barrio de Boa Vista, fue inaugurado el 25 de octubre de 1911, bajo la dirección del escritor Eustórgio Vanderley. Era llamado por los estudiantes de la época de “Polypulgas”.En 1932, pasó a pertenecer a la empresa de Luiz Severiano Ribeiro.
En esa época también existía un cine al aire libre, el Siri, que proyectaba anuncios y películas intercalados, de una casa de dos pisos para una pantalla. Localizado en la Plaza de la Independencia, fue cerrado por la Policía en el gobierno Dantas Barreto, “por el bien de la moral”.
A partir de 1913, el Teatro de Santa Isabel funcionó también como cine y era considerado en la época el mejor de Recife, el que poseía la “proyección más clara, fija y nítida” entre los cines de la ciudad.
La primera sesión ocurrió el día 14 de junio de 1913, con grande estilo, con la inauguración en Recife, de un nuevo cinematógrafo, un aparato inventado en 1895 por los hermanos Lumière, capaz de producir en una pantalla el movimiento, por medio de una secuencia de fotografías. Había sesiones nocturnas diarias y matinés los sábados y domingos.
Comodidad y comodidad eran las ventajas apuntadas por el público delante de la competencia. Aún sin poseer iluminación eléctrica, que sólo fue instalada tres años después, era considerado el cine “más cómodo e higiénico de Brasil”.
Se podía ver una serie de diez películas, con derecho a la banda de música en el intervalo de las exhibiciones, en las instalaciones lujosas del teatro, por apenas tres mil réis, diez veces menos de lo que se pagaba por un espectáculo de ópera.
El Moderno, que a partir de 1915 pasó a funcionar también como cine, fue inaugurado como teatro, en 15 de mayo de 1913, en el barrio de Santo Antônio. Sus primeros propietarios fueron el coronel Agostiño Bezerra da Silva Cavalcanti y Carneiro da Cuña & Cia.
El Teatro do Parque, localizado en la Calle del Hospicio, nº 81, fue inaugurado el día 24 de agosto de 1915 y pasó a funcionar también como cine a partir de 1921. Construido por el Comendador Bento Luís de Aguiar, fue arrendado por Luiz Severiano Ribeiro en 1929, que en el día 24 de marzo de 1930, inauguró en aquella casa de espectáculos el cine sonoro en Recife, con la película La divina dama.
En 1915, surgió aún en la ciudad el Cine Ideal, localizado en el Patio do Terço, nº 61, en el barrio de São José. Este cine tenía una particularidad: poseía 250 asientos de primera clase y 217 de segunda clase.
El cine Glória, famoso por sus sesiones de la tarde, estaba situado en la Calle Derecha, nº 127, también en el barrio de São José y su inauguración ocurrió el día 4 de septiembre de 1926, con la exhibición de la película “Flores, mujeres y perfumes”.
Tenía como su mayor público los frecuentadores del Mercado de São José y de la Plaza Dom Vital.
En 1922, Recife contaba aún con el cine Brasil, en la Calle Imperial, el São José, en el patio del Mercado de São José y, en 1932, funcionaban aún los cines de barrios: Espiñeirense, Encruzilhada, Pina y Central.
En la década de 1930, fue inaugurado en la Calle Viscdonde de Iraya, en el barrio de la Torre, el Cine Torre, que tuvo gran movimiento de público, mas sólo sobrevivió hasta finales de los años 1960.
En la década de 1940, fueron inaugurados en Recife los cines Art Palácio y Trianon, en el centro de la ciudad, pero ambos después de una fase áurea de público cerraron sus portas.
El cine São Luiz, perteneciente al grupo de Luiz Severiano Ribeiro, fue inaugurado en el piso térreo del Edificio Duarte Coelho, el día 7 de septiembre de 1952, con modernas y lujosas instalaciones.
Fue palco de grandes eventos, lanzamientos de películas y era un local muy frecuentado por la sociedad recifense. El día 3 de octubre de 1953, a media noche, se realizó la première nacional de la película pernambucana, El canto del mar, dirigido por el cineasta Alberto Cavalcanti.
Cines más recientes como el Veneza, en la Calle del Hospicio y el Astor y el Ritz, localizados cerca al Parque 13 de Mayo, también tuvieron su época en la ciudad, pero ya hace algún tiempo, cerraron sus puertas.
El progreso, el adviento de la televisión, del vídeo-casete y del DVD interrumpieron la trayectoria de crecimiento de las salas de proyección en la ciudad y fueron los responsables por el cierre de muchos cines de la ciudad.
En 1968, existían en Pernambuco cerca de 101 cines, siendo 28, sólo en la ciudad de Recife. Hoy, sólo sobreviven salas de proyección de películas en centros comerciales de la ciudad.
Recife, 12 de noviembre de 2004.
fuentes consulted
BOLETIM DA CIDADE E DO PORTO DO RECIFE, Recife, n. 43-62, jan./dez. 1952-1956.
CAVALCANTI, Carlos Bezerra. O Recife e seus bairros. Recife: Câmara Municipal, 1998.
DIAS, Isa . Filmes no Teatro Santa Izabel. Suplemento Cultural D.O. PE, Recife, ano 10, p. 3, dez. 1995.
LEMOS FILHO. O Diabo a quatro. In: ______. Clã do açúcar. Rio de Janeiro: Livraria São José, 1960. p. 291-304.
SPENCER, Fernando. Na Rua Nova nasceu o primeiro cinema. Suplemento Cultural D.O. PE, Recife, ano 10, p. 3-4, dez. 1995.
cómo citar este texto
Fuente: GASPAR, Lúcia. Cines antiguos de Recife. Pesquisa Escolar Online, Fundação Joaquim Nabuco, Recife. Disponível em: <http://basilio.fundaj.gov.br/pesquisaescolar>. Acesso em: dia mês ano. Ex: 6 ago. 2009.